BOICOT A PEKIN 2008

"Si el fuego olímpico es sagrado, los derechos humanos lo son todavía más"

Los juegos olímpicos del verano de 2008 sitúan a China en posición de modelo político, social, económico y deportivo para todo el planeta. Sin embargo, el Partido-Estado chino, que liquidó con sangre a sus oponentes durante los acontecimientos de Tien An Men en 1989, sigue golpeando los derechos democráticos elementales, multiplicando los campos de concentración (“rehabilitación”, “trabajo”) y desarrollando una geopolítica de agresiones. ¿Cambiará algo la carta olímpica? La historia demuestra que el CIO no respeta sus ideales de “fraternidad”, de “paz” y de “amistad”.

El gobierno de China trata de quebrar todo cuanto en China hay como disidentes, oponentes, insumisos, intelectuales críticos, pobres, improductivos y sindicatos libres. La pena de muerte se ha aplicado oficialmente a 1.770 individuos en 2005 y 3.990 están condenados a muerte. La Laogai Research Foundation cuenta 4.000 campos de trabajo. La organización de estos "Juegos Olimpicos" acelera la destrucción de numerosos barrios populares (hutongs) y sitios históricos en el marco de una urbanización salvaje dirigida contra las poblaciones más pobres (expropiación de tierras, etc.). El reconocimiento internacional de los juegos, consagrado por el consenso olímpico, dará un visado de honorabilidad a todas estas violencias. China, que tiene en su punto de mira la conquista de Taïwan, persigue igualmente una ofensiva diplomática y guerrera contra Japón y aterroriza la región autónoma de los Ouïghours. La colonización del Tibet está cobrando una dimensión genocida: suelen practicarse asesinatos, torturas y abortos forzados con total impunidad. Gracias a las ilusiones de “paz y amistad” entre los pueblos, los "Juegos Olimpicos" han servido, desde siempre, como pantalla ante las estrategias belicistas y exterminadoras (Hitler y la segunda guerra mundial, los soviéticos y Afghanistan).

Sin embargo, como señalaba Amnistía Internacional en el nuevo informe que ha publicado de la serie "La cuenta atrás para los Juegos Olímpicos", el ejecutivo de Beijing ha tomado el camino opuesto, y mientras más se acerca la fecha del comienzo de los eventos deportivos, mayor es la represión del régimen, la vulneración de los derechos elementales de sus ciudadanos. En Pekín y sus alrededores, las autoridades chinas han silenciado y encarcelado a activistas de derechos humanos pacíficos en la “limpieza” previa a los Juegos Olímpicos. En Tíbet y zonas circundantes, la represión policial y militar de los manifestantes ha dado lugar a graves violaciones de derechos humanos en los últimos días.

El boicot a los Juegos Olímpicos - ¿Obligaría a China a tomarse en serio el respeto a los Derechos Humanos de una vez por todas? - ¿O conseguiría el efecto contrario? - ¿Es una opción viable? ¿O está condenada al fracaso, como decía el embajador chino en España? ¿Existe algún país capaz de sacrificar sus intereses económicos en pos de liderar un movimiento semejante, teniendo en cuenta que las inversiones extranjeras superan en China los mil millones de euros diarios? ¿Nos hace el silencio cómplices de las conductas de Beijing? ¿Sucederá como en aquel infame Mundial de Fútbol en Argentina de 1978, en el que los prisioneros de la ESMA eran torturados mientras escuchaban el rugido de las tribunas del estadio del River Plate?

Yo Carlos Hugo Becerra apoyo el Boicot a los juegos olimpicos en China, puesto que si en este momento crucial todos los países hacen la vista gorda y además participan del genocidio, no se que no sera justificable en el futuro o como no se nos caerá la cara de vergüenza. Entiendo que China sea una potencia económica y que el resto de países tengan interés en instalarse allí, pero yo no se hasta que punto somos empresarios, trabajadores, presidentes, ministros, limpiadores, deportistas... antes que personas.

Quiero y admiro al "Pueblo Chino", pero odio desde lo mas profundo de mi corazón a los "Gobernantes hijos de puta de China"

Por lo menos, así lo veo yo.

CarlosHugoBecerra.